Sin tacos, churros ni elotes:
Tianguis Navideño en Plaza El Mundito inicia sin comida por nuevas medidas de seguridad
Hermosillo, Sonora.— Diciembre 1 del 2025. l tradicional Tianguis Navideño de Plaza El Mundito abrió sus puertas este año con un cambio inesperado: no habrá venta de alimentos, una medida implementada a recomendación de Protección Civil tras la tragedia ocurrida en Waldo’s el pasado 1 de noviembre.
La plaza ubicada en Morelos y avenida Horacio Soria comenzó a llenarse de comerciantes desde la mañana de este lunes, pero sin las parrillas, anafres, tanques de gas ni los aromas clásicos de tacos, elotes o churros que por más de cuatro décadas formaron parte de la experiencia decembrina.
Una decisión que marca el ambiente del tianguis
José Carlos Huitrón García, representante de la Federación de Comerciantes en Pequeño, explicó que la instrucción de Protección Civil fue contundente:
“No se permitió ni carbón, ni gas, ni ningún tipo de parrilla. La indicación es estrictamente por seguridad; lo ocurrido en Waldo’s está demasiado reciente.”
Aunque algunos vendedores expresaron su preocupación por la afectación económica, reconocen que las medidas buscan evitar riesgos en un espacio donde se concentran cientos de familias.
250 comerciantes, pero sin cocina
Gonzalo Bautista, dirigente de comerciantes afiliados a CTM, detalló que alrededor de 250 puestos permanecerán instalados hasta el 6 de enero, ofreciendo únicamente ropa, juguetes, accesorios y artículos navideños.
La ausencia de comida no solo cambia la dinámica del tianguis, sino que rompe con una tradición de 45 años en la que los puestos de alimentos eran parte fundamental del ambiente festivo y del ingreso de muchos comerciantes.
Un tianguis distinto, marcado por la seguridad
La medida se suma a otras disposiciones de Protección Civil en el Centro de Hermosillo, donde también se han reabierto vialidades parcialmente tras el incendio de Waldo’s que dejó 24 personas fallecidas y 11 lesionadas.
Para muchos comerciantes, esta temporada navideña llega con sentimientos encontrados: la esperanza de mejorar las ventas… y el recuerdo latente de una tragedia que transformó la manera de operar en la zona.